A menudo, cuando estás pasando por momentos particularmente difíciles, como preocupaciones, ansiedad, insatisfacción, estrés y más, todos estos escenarios te conllevan a la destrucción de ti mismo. Lo que es importante subrayar es cómo cada quien puede defenderse y qué se puede hacer para enfrentar la situación.
Muchas veces te has preguntado: ¿Cómo debes mantener tu paz mental estando al límite? En esta ocasión te voy a dar algunos consejos de lo que puedes hacer, cuando consideres que has perdido la estabilidad mental o emocional causada por la lucha diaria.
Mucho verde alrededor
Para aquellas personas que no lo saben, el color verde tiene una influencia en el cerebro del ser humano, porque contribuye a estar relajados y por consiguiente a tomar las cosas con más tranquilidad.
Es por esta razón que es muy efectivo salir al parque o un bosque, en pocas palabras, compartir con la naturaleza y llenarte de mucho verde alrededor. Con un simple paseo veras lo bien que vas a sentir.
Si donde te encuentras no tienes un parque cercano, es bueno que comiences a buscar varios tipos de plantas que decoren tu ambiente, para que sientas esta buena energía que transmiten las plantas.
Respira y cierra los ojos
Uno de los principios fundamentales cuando quieras conservar tu paz mental es realizar respiraciones profundas cerrando los ojos y de la manera más relajada posible. Lo más indicado es hacer tres respiraciones. Recuerda que cuando estas estresada el ritmo de la respiración es bajo y como consecuencia la circulación sanguínea es más lenta.
Toma un té y no un café
Si eres de las personas que les gusta el café y todo lo soluciona con una taza de café, lo estás haciendo de manera equivocada, ya que el café por su cafeína te mantendrá despierta y es posible que te mantengas ansiosa.
El té produce el efecto contrario al café, de manera que logra relajarte, hasta su agradable aroma te puede reconfortar. Incluso puedes hacer infusiones de hierbas que te vendrán muy bien.
Basta de golosinas en exceso
Cuando te sientes estresada muchas veces te produce ansiedad, provocándote unas ganas inmensas de comer todo lo que se te ponga en tu camino. Y comer con ansiedad solo te producirá:
- Aumento de peso descontrolado por las calorías en las golosinas.
- Un desequilibrio estomacal.
- Debilidad o caries en la dentadura producto del azúcar.
- Un exceso de azúcar que tu cuerpo no está dispuesto a soportar ni controlar.
Lo más recomendable es:
- Dejar el consumo de golosinas en exceso.
- Realizar actividades físicas o ejercicios.
- Comer frutas o frutos secos en esos momentos de ansiedad o de hambre repentina.
Estas recomendaciones son lo mejor para tu cuerpo y mente. Esto te ayudara a desaparecer el estrés.
Recuerda que todos pasamos por momentos difíciles en la vida cotidiana, donde en ocasiones llegamos al límite, así que puedes regalarte 5 minutos diariamente para aclarar tu mente. Procura escuchar tu música favorita, trata de hablar de temas agradables y no quejarte por todo. Suerte.